Un país situado en el corazón de América del Sur, es conocido por su diversidad geográfica y cultural. Su capital, La Paz, se encuentra a una altitud impresionante de aproximadamente 3,650 metros sobre el nivel del mar, lo que la convierte en una de las capitales más altas del mundo. Esta ubicación única ofrece vistas panorámicas impresionantes de las majestuosas montañas de los Andes que rodean la ciudad.
La geografía de Bolivia es igualmente sorprendente, con una variedad de paisajes que van desde las altas cumbres de los Andes hasta la selva amazónica en la región norte del país. El salar de Uyuni, el desierto de sal más grande del mundo, es otro de los destacados geográficos de Bolivia, ofreciendo un paisaje surrealista de vastos horizontes blancos.
En cuanto a sus tradiciones, Bolivia es rica en cultura indígena y mestiza. Las festividades tradicionales, como el Carnaval de Oruro y la Fiesta de la Virgen de Urkupiña, son celebraciones coloridas que reflejan la rica herencia cultural del país. La música, la danza y las artesanías también desempeñan un papel importante en la vida cotidiana de los bolivianos, mostrando la diversidad y vitalidad de su patrimonio cultural.
1,099 millones km²
Más de 3,500 m de altura, su capital administrativa, La Paz
El aumento de ciudades intermedias en el país refiere el rápido crecimiento urbano, tres de cuatro ciudadanos conforman la población urbana. Hoy Bolivia tiene una densidad poblacional de 9.3 hab/km2.
Desde hace más de un siglo Bolivia perdió su única salida al mar a manos de una guerra conjunta entre Bolivia, Chile y Perú. En 2018, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) determinó que Chile no contrajo obligación legal para negociar el retorno al océano, como demandó Bolivia.
12,08 millones (2021)
Si miramos la evolución de la Esperanza de Vida en Bolivia en los últimos años, vemos que ha subido respecto a 2018 en el que fue de 67,75 años, al igual de lo que ocurre respecto a 2009, en el que estaba en 65,88 años.
Bolivia tiene una población de 12.079.472 personas, por lo que podemos considerarlo un país medio en cuanto a población se refiere. Las principales caracteristicas de la estructura de la población en Bolivia: La población masculina es el 50,16%, ligeramente superior a la femenina.
El promedio de edad media en Bolivia asciende a 24,4 años. Según el portal de División de Población de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en Bolivia la gente vive en promedio 68,8 años (expectativa de vida), el dato más bajo de Sudamérica, mientras que el más alto lo tiene Chile, con 81,2 años.
Antawara. Morenada. Caporales. Kullawada. Llamerada. Kallawaya. Waca Waca. Ch’utas.
Premio Nobel de Medicina 2012: John B. Gurdon y Shinya Yamanaka.
Enrique Arnal
Nació en el complejo minero de Catavi, departamento de Potosí, Bolivia, en 1932, lugar donde pasó los primeros ocho años de su niñez. Ahí Arnal empezó el colegio en una escuela fiscal de la empresa minera de Catavi. El pintor narra que en esa época llegaba mucho ganado caballar y mulas, empleados en el transporte de metal. La experiencia de Enrique Arnal de aprender a montar a caballo y convivir con un cóndor llamado Miguel, adoptado como mascota por los mineros del lugar, originó en el pintor su notorio interés por los animales, los cuales representaría en numerosas piezas posteriormente
Marco Antonio Etcheverry Vargas
(Santa Cruz de la Sierra, 26 de septiembre de 1970) es un exfutbolista y entrenador boliviano. Como jugador, se desempeñó como centrocampista, y ha sido reconocido como el «mejor futbolista boliviano de todos los tiempos».
Roberto Mamani Mamani
es un pintor boliviano autodidacta de origen aimara y reconocido a nivel mundial. Nació en Cochabamba en 1962. Y con buen ojo siguió el consejo de su abuela que decía: «los colores fuertes son para ahuyentar a los malos espíritus y no quedarse en la oscuridad»
La gastronomía boliviana es una amalgama de tradiciones indígenas, influencias europeas y sabores únicos de la región andina. Destacan platos emblemáticos como la salteña, una empanada jugosa y rellena de carne y verduras. El anticucho, brochetas de carne marinada, y el saice, un guiso de carne con papas y vegetales, reflejan la diversidad culinaria. El quinoa y amaranto son ingredientes autóctonos fundamentales, presentes en platos como el «fricasé de quinoa». Además, las bebidas como la chicha y el api, hechas de maíz, son esenciales en la experiencia gastronómica boliviana, complementando una rica oferta que celebra sus raíces culturales.
Las bebidas típicas de Bolivia reflejan la rica diversidad cultural y geográfica del país. La chicha, una bebida ancestral fermentada a base de maíz, es común en diversas regiones. El api, preparado con maíz morado y acompañado de pastelitos, es una opción popular para el desayuno. En las zonas andinas, el mate de coca es apreciado por sus propiedades medicinales y energizantes. La singani, aguardiente de uva, destaca como licor nacional, y se utiliza en cócteles como el chuflay. Estas bebidas, arraigadas en la tradición y la identidad cultural, añaden un toque distintivo a la experiencia culinaria boliviana.
En Bolivia, chola es una denominación étnica referida a mujeres. Se aplica de manera contemporánea a todas aquellas que utilizan vestimentas tradicionales establecidas durante el proceso inicial de mestizaje en el actual territorio boliviano y también se hace extensivo a otras mujeres mestizas e indígenas.
La relación entre un cholo boliviano y la llama es profundamente arraigada en la cultura y la tradición de Bolivia. La llama, considerada un símbolo nacional, es una parte integral de la vida de muchas comunidades indígenas en Bolivia, donde se utiliza como animal de carga, fuente de alimento y materia prima para la confección de prendas de vestir y artesanías.
Los cholos, por su parte, son miembros de la sociedad boliviana de ascendencia mestiza, que a menudo tienen una conexión especial con la llama debido a su importancia en la vida cotidiana y su papel en la economía local.
La relación entre un cholo boliviano y la llama está marcada por el respeto mutuo y la dependencia mutua. Los cholos cuidan y protegen a las llamas, mientras que estas proporcionan a los cholos con recursos vitales para su supervivencia en las duras condiciones de la vida en las tierras altas de Bolivia.
En resumen, la relación entre un cholo boliviano y la llama es un vínculo profundo y significativo que refleja la estrecha conexión entre el pueblo y la naturaleza en Bolivia.